A las 12 del mediodía del domingo día 5 de abril de 1896, y a los acordes del patriótico y popular pasodoble “Cádiz”, se celebraría la finalización de las obras de la nueva fuente ubicada en la Plaza de la Paz que sustituiría a la antigua y semiderruida cuyo arreglo había sido encargado, el 7 de febrero de 1895, al arquitecto municipal Luis Domingo de Rute, pero finalmente, debido a la dimisión de éste y la imposibilidad de una compostura de calidad, se solicitaría un proyecto totalmente inédito al ahora arquitecto municipal Juan Cabrera Latorre, que presentaría su diseño el jueves día 10 de octubre de 1895.
Para adjudicar su construcción se fijaría una subasta, con un precio de salida de 4.029,77, a celebrarse a las 11 horas del domingo 27 de octubre de 1895. Tras varias pujas de los contratistas harenses Domingo Hernando y Julián Virumbrales, sería asignada a éste por 3.000 pesetas al aplicar una baja del 25,56% por quedar a su disposición los materiales de la fuente antigua a derruir.
A su finalización, el 5 de abril de 1896, la obra sería examinada por el Alcalde accidental Arturo Marcelino, y los concejales Rafael Bengoa, Victoriano Prieto y José Angulo siendo recibidas con carácter provisional y abiertas al público a las 12 horas.
Celebración del evento
Para celebrar el evento, a las 20:30 horas, debutaría, en el Teatro Bretón, el Orfeón Harense, cuyo Director Delfín Gómez Bringas ejercía, asimismo, como profesor del colegio de segunda enseñanza “La Concepción” y durante breve tiempo de Director de la Banda de Música.
Al levantarse el telón una salva de aplausos saludaría a sus componentes, que sorprenderían al público por su correcta formación y compostura; luciendo vistosos lazos encarnado-amarillos regalo de las señoritas Partenia Retes, Romualda del Campo y Juana Serrano, asimismo un acomodador entregaría al señor Gómez Bringas una preciosa batuta grabada donde podía leerse: El Orfeón Harense a su director.
Seguidamente daría comienzo el concierto cantando, “El Himeneo”, “Alborada Gallega”, “La Aurora”, Retreta y rataplán” y la “Jota”. La interpretación rayaría el delirio del público que aplaudiría sin cesar.
Para dar descanso a los orfeonistas Ciriaco Codina recitaría, con bastante acierto, el poema de Núñez de Arce titulado “El Vértigo” y cantaría, acompañando a los señores del Val, Villarejo y Rodríguez la zarzuela bufa “Un cambio de pasaporte”.
En uno de los intermedios la Banda de música interpretaría el pasodoble “Cádiz”, con el que el entusiasmo del público llegaría a lo indecible.
La noche del jueves día 9 de abril y en atención al obsequio recibido de las jóvenes que habían confeccionado los lazos, el Orfeón daría a éstas una serenata. Comenzando en la Plaza de la Cruz, donde habitaba Juana Serrano, interpretando “El Himeneo”, “La Aurora” y “Jota”; desde donde se trasladarían a la calle de las Cuevas, donde vivía Romualda del Campo, cantando “Rataplán y retreta”, Alborada Gallega” y “Jota”, pasando después al Arrabal, bajo la ventana de Partenia Retes, finalizando la serenata con “La Aurora”, “Alborada Gallega”, Rataplán y retreta” y “Jota”.
No hay que decir que el acto sería multitudinario, recibiendo cada interpretación atronadoras salvas de aplausos de los entusiastas acompañantes.
Pasados los dos meses de garantía, el viernes 5 de junio de 1896, la Comisión de obras integrada por José Sánchez, José Pacheco y Jenaro Fernández, asesorados por el Arquitecto municipal señor Cabrera Latorre, aceptaría definitivamente la obra. Aprobación que sería corroborada en sesión municipal celebrada el día 6 del mismo mes.
Esta fuente adornaría la Plaza de la Paz hasta 1930, ya que el martes 14 de enero de este año el contratista harense Leoncio Estefanía sería el adjudicatario de la subasta celebrada para la construcción del kiosco de música que el Alcalde Alberto Roig, con el respaldo de la Corporación y a propuesta del Músico mayor Miguel de la Fuente, acordaría construir tras su demolición.
