En abril de 1904 nuevas extracciones conllevarían a la ampliación de la explanada alrededor de la mesa de piedra y a la mejora del camino.
En 1907, el 3 de abril, se daría lectura a un escrito del maestro de obras Julián Suso en el que exponía el lamentable estado en que se encontraba la fuente y las causas por las que la plazuela se anegaba de agua, acordándose el arreglo bajo su dirección. Pero, a la hora de desmontarla, la columna se rompería debido al mal estado de la piedra y el desgaste de los años, por lo que la Corporación pediría al señor Suso, en sesión celebrada el 3 de mayo, un esbozo para su sustitución, solicitándole catálogos para elegir el modelo que más adornase a la fuente.
El proyecto sería presentado el 24 de julio, ascendiendo a 401 pesetas con 30 céntimos, finalmente 450 pesetas. El trabajo, que sería considerado como urgente, se realizaría por medio de subasta, pero, al no contarse con los fondos necesarios, quedaría pendiente hasta que el Tesorero Municipal reuniese los necesarios recursos para su ejecución. No había transcurrido un mes cuando en sesión celebrada el 14 de agosto se fijaría el 18 del mismo mes para la celebración de la subasta, adjudicándose definitivamente el día 21 en las 450 pesetas presupuestadas a su único licitador José María Gutiérrez Castillo, con la obligación de consignar en Depositaría municipal, en concepto de fianza, el 10% de esta cantidad (El señor Gutiérrez había nacido en Haro el 12 de marzo de 1878 y fallecido en Calatayud el 16 de octubre de 1936. Según consta en los certificados de bautismo y de defunción expedidos por la Parroquia de Santo Tomás de Haro a Fernando de la Fuente y el Registro Civil de la localidad aragonesa a Gabriel Pérez Ábalos.
José María Gutiérrez, también construiría, finalizándolos en abril de 1926, algunos de los canales de cemento que sirven para el riego de las parcelas de Fuente del Moro, intervendría en varias obras en Bodegas Bilbaínas y construiría algunas fosas y panteones en el Cementerio. Tras esta compostura el asentamiento de Abén-Harr en la pilastra sería modificado, para, en lo sucesivo, dirigir su mirada al norte, hacia el camino que viene de la Vega, como para poder observar quien llega a visitarle.
El 23 de febrero de 1911 se autorizaría a Guillermo Gato, administrador de Bodegas Bilbaínas, para retirar cuarenta carros de tierra para el jardín que proyectaba en los terrenos de la bodega. Pero su actual configuración seguiría conformándose durante el primer cuarto del siglo XX, ya que el 22 de julio de 1914 se autorizarían nuevas sacas de tierra, las más importantes, al ingeniero del ferrocarril Haro-Ezcaray Jesús Ramírez; el 3 de agosto de 1917 a Felipe Ugalde, a razón de 2 pesetas por carro; el 23 de enero de 1918 a Enrique Ugalde, cuatrocientos carros para la formación de los jardines de su finca en el “Alto de Santo Domingo” a razón de 1 peseta por carro, pero con la condición de que rellenase el terreno vaciado con guijo grueso; y el 7 de marzo de 1919 a Dionisio del Prado, doce carros, al precio anteriormente estipulado.
A partir de esta fecha, las nuevas extracciones deberían consultarse al Director de la Estación Enológica Víctor Cruz Manso de Zúñiga, para que evaluase si eran factibles o desautorizarlas por posibles daños al entorno.
Otro episodio vandálico, que merecería la crítica de toda la ciudad, se produciría en 1938, y sería tratado en sesión celebrada el lunes 5 de septiembre, reflejándose en el Acta:
“Oficio del Juzgado de instrucción sobre sumario por la destrucción de la fuente del Moro:
Se procedió a dar cuenta de un oficio del Señor Juez de Primera Instancia e Instrucción de esta ciudad, en el que en cumplimiento de lo preceptuado en el artículo 109 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, y cumpliendo igualmente lo que dicha Autoridad tiene acordado en el sumario que instruye por el delito de daños en lugares públicos, contra Isaías Prado Hierro y otros, ofrece a la Corporación el procedimiento por si desea mostrarse parte en tal sumario, que lo es el 25 del mes en curso.
La Corporación mostró por unanimidad no mostrarse parte en la causa citada sin renunciar a cuantos derechos pudieran corresponderle, y a propuesta del señor Victoriano Prieto se acuerda igualmente que sí como consecuencia de los hechos que la Justicia va a depurar resultara culpable algún vecino de Haro sea declarado de antemano como indeseable y gestionar su expulsión de este término municipal”.
Pero pese a estos actos de gamberrismo, puntuales, Fuente del Moro sigue siendo el parque más frecuentado por jarreros y visitantes, además de ser lugar de paso para los venajistas que trabajan sus parcelas a escasos metros de su pradera, en la que a través de los años han proliferado numerosos asadores y mesas de hormigón que prestan su servicio a los visitantes que quieren disfrutar de sus encantos y a los excursionistas que el día de la “Jira”, se acercan a saludar a Abén-Harr y despedir las fiestas hasta el próximo año.