El Albergue de Peregrinos de la Cofradía del Santo ha abierto este domingo sus puertas para acoger a los peregrinos que van haciendo el Camino de Santiago.
Las instalaciones, que ya están a punto, se han adaptado a los protocolos de seguridad que exige la normativa vigente en el marco de la emergencia sanitaria por el COVID-19. Desde la Cofradía indican que se han tomado muchas medidas para garantizar la seguridad de los peregrinos y de las personas que atienden la instalación turística.
Medidas de seguridad por el COVID-19
Será obligatorio el uso de mascarilla y guardar la distancia de seguridad de 1,5 metros. Hay geles hidroalcohólicos en todas las estancias y también en las zonas comunes.
En la entrada del albergue se tomará la temperatura, habrá una alfombra desinfectante para el calzado, maparas protectoras y las mochilas y botas se meterán en una bolsa individual. Asimismo, el aforo de las habitaciones queda reducido al 50 % y se retirarán mantas y sábanas de tela sustituyéndose por sábanas desechables.
Además, no estará permitido el uso de la cocina y la limpieza y desinfección de las estancias se realizará con procedimientos “completamente seguros y de manera frecuente”. El compromiso con los peregrinos por parte de la Cofradía del Santo desde hace siglos ahora se ve reforzado para el acogimiento seguro que la nueva normalidad impone, aseguran.