Una promotora ha comenzado los trabajos previos para rehabilitar el edificio Felipe Pérez en el centro de Haro. Una iniciativa más para relanzar y embellecer el casco antiguo de la ciudad jarrera. En 2003, se anunciaba a través de las páginas de El Correo, el cierre del establecimiento Hermanos Felipe Pérez y Cía, el negocio más antiguo de la localidad.
El negocio fue fundado en 1860 como herrería y forja en la calle La Ventilla y después amplió su actividad con la fabricación de prensas. Hermanos Felipe Pérez y Cía acabaría tomando sitio en la calle Lucrecia Arana, en los números 6 y 8. Sus escaparates, con productos de bazar y ferretería, se asomaban tanto hacia Lucrecia Arana como a la calle Arrabal.
Licencia de obras para la rehabilitación del edificio
Con el cierre del establecimiento por la crisis que persiguió en aquella época al sector de la máquina herramienta, se abandonó un imponente edificio que albergó uno de los establecimientos más vistosos de la ciudad jarrera, con aquel gran cajonero de madera que dominaba todo el local y que mostraba al cliente en sus huecos todas herramientas y piezas que se vendían.

Al final, el cierre de este negocio, como el de otros muchos que convirtieron el entorno de la plaza de la Cruz en uno de los más dinámicos de La Rioja Alta, terminaron por convertir la arteria que hace de puerta al casco histórico en un solar lleno de anuncios de se vende, se traspasa o se alquila.
Pero parece que en los últimos tiempos esa tendencia se está revirtiendo gracias, por ejemplo, al anuncio de la adquisición del Palacio de la Cruz para reconvertirlo en un hotel de cuatro estrellas, y ahora a la promotora Muber 2006, que obtiene licencia de obras para proceder a la rehabilitación integral del edificio que albergó la labor de los profesionales de Felipe Pérez.
14 viviendas con trastero y garaje
De hecho, ya se han dado los primeros pasos para la ejecución de estos trabajos que contemplan, según recoge el acuerdo adoptado en Junta de Gobierno, el “derribo parcial” de un inmueble que linda con las dos calles ya citadas.

Es más. La base que soportará los movimientos de la grúa ya ha sido instalada sobre la calle Víctor Pradera y han sido pintados sobre Lucrecia Arana y Arrabal, los pasos de cebra que obligarán a los peatons a cambiar de acera ya que en los tramos de fachada se colocarán próximamente los andamios que servirán de protección a los ciudadanos y de soporte a los trabajadores de la constructora.
La promotora anuncia la construcción de 14 viviendas dotadas de trastero y garaje, y espera que la ejecución del proyecto podría prolongarse durante unos dos años. Con esta nueva iniciativa, en este caso para construir nuevos pisos, se intenta, de suyo, recuperar una zona histórica de la ciudad de Haro. La pena es que se perderán para siempre los calados con los que contaba el edificio, y cuya recuperación se hacía imposible.