Esta legislatura nuestra bella ciudad de Haro ha recibido múltiples visitas, y no nos referimos a la llegada de turistas que recorren día sí y día también las calles y bodegas jarreras. Hablamos de visitas institucionales de altísimo nivel: desde Felipe VI hasta varios ministros, sin olvidar la última de la ministra y también portavoz de Gobierno de España, Isabel Rodríguez, a la que nos referiremos en las próximas líneas.
Analizando el propósito de las visitas mencionadas, comprobamos que en enero de este año el ministro Planas estuvo de paso para visitar las instalaciones de Beronia (Ollauri); los reyes de España vinieron en pleno Covid-19 a promocionar Haro como destino turístico y, el hoy denostado Ábalos, tenía en su agenda la inauguración del María Díaz (importantísimo centro de FP). Resulta, por tanto, innegable lo conveniente de estos actos y mi agradecimiento es grande por el esfuerzo de venir a nuestra casa para ensalzar lo que aquí se dice y se hace…
Pero a muchos –no sólo al que escribe- se le ocurre una pregunta comprometedora para los socialistas, ¿a qué vino la ministra Isabel Rodríguez a Haro? Todas las crónicas periodísticas, incluidas de las de agencia, destacan su papel de acompañante a la flamante candidata Naiara Hernáez. Pero, ¿es suficiente motivo como para desplazar a toda una ministra?
Lo cierto es que venía de Bilbao y le caía de paso en su vuelta a Madrid. No obstante, la pregunta correcta es: ¿debe un ministro venir a hacer campaña? Desde el Gobierno tienen claro que vino a hacer nada, pues no aparece la visita en la agenda gubernamental, aunque ella evidentemente estuvo en calidad de ministra, así se promocionó el acto, vulnerando el principio de neutralidad electoral que en todo punto debería respetar el Gobierno de España.
“Grave problema con el alquiler”
Sea como fuere, lo cierto es que la ministra estuvo en Haro junto con la presidenta Andreu, la candidata y la plana mayor socialista jarrera… Echando un breve vistazo a las palabras que allí se dijeron se comprueba lo obvio: no cabe esperar nada brillante en esta clase de actos, pero he de confesar que me sorprendió el tono desafortunado de Isabel Rodríguez hablando de la enésima promesa de vivienda del presidente Sánchez, más cuando Haro -como el resto de España- tiene un grave problema con el alquiler: no hay y lo poco que se oferta es caro.
Así, se nos habló de las bondades del SAREB y sus inmuebles, fórmula mágica que nos salvará a todos de pagar un alquiler estratosférico o, mejor aún, de alquilar nuestra casa y que no podamos echar al ‘inquiokupa’ (asunto muy de moda en la actualidad) ¿No hay nadie en Haro que le aconseje otro tema? ¿No conoce la candidata la situación de la ciudad? ¿No saben que las únicas viviendas del banco malo en Haro son los esqueletos poblados de ratas que nadie quiere?
El partido socialista ha demostrado ser una gran escuela de prestidigitación, de trileros y profesionales de la demagogia que en nada ayudan a nuestra tierra… Palabras vacías como inclusión, igualdad, ecología y progreso quedan en nada si no se aportan parámetros para poder comparar… Una hoja de ruta, la socialista, que pasa por decirnos que la vivienda es cara por nuestra culpa, que debemos tirar nuestros coches y que planchar de madrugada es la mejor receta para cuidar el medioambiente a la vez que ahorrar.
Cada vez más gente se vacuna contra la ingenuidad, y así vengan ministros o el mismísimo presidente del Gobierno, desde Haro le respondemos lo que el viejo Diógenes le espetó al gran Alejandro Magno: “Apártese, me quita el sol”. En román paladino: dejadnos en paz, ya que para decir tonterías es mejor ni venir ni molestar.
Iván Rivera es candidato de VOX a la Alcaldía de Haro
