- Educación “agilizará” los trámites para solucionar los problemas de goteras en la Escuela Infantil de Haro
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El viceconsejero de Educación, Universidades y Formación Profesional, Miguel Ángel Fernández Terroba, ha acudido este miércoles a Haro para hablar con los padres y madres, unos 50 en total, que habían convocado una concentración en la Escuela Infantil ‘Las Luces’ para pedir que se aceleren las labores de reparación de la cubierta y se firme también su sustitución.
Cabe recordar que la escuela estuvo cerrada debido a las lluvias torrenciales de hace unas semanas y que provocaron goteras, un problema que arrastra las instalaciones casi desde su puesta en marcha hace más de una década. Padres y madres han denunciado que el problema con las goteras se viene dando desde hace años, han recordado que ya se parcheó en su día y que las goteras volvieron a aparecer. “Siempre ha habido goteras”, protestaba una madre. Algunos incluso han pedido al Gobierno riojano que tome medidas legales contra los que diseñaron y ejecutaron la obra en su día, ya que “como se puede comprobar no se hizo bien”. “Tienen que darse cuenta de que el servicio de guardería para muchos de nosotros es vital”, explicaba uno de los padres al viceconsejero. “Algunos trabajamos fuera de Haro y no tenemos aquí a nadie que pueda ir a buscar a nuestra hija si de repente llueve de manera torrencial y los niños no pueden estar aquí. Si me voy a trabajar vivo en una continua incertidumbre pensando si va a llover o no”. “Yo no puedo ir otra vez a mi trabajo a pedir otro día diciendo que ha vuelto a llover y no puedo llevar a mi hija a la guardería”, decía otra madre.
Los padres piden al Gobierno que tome medidas legales contra los que ejecutaron la obra
Desde el Gobierno riojano, el viceconsejero se ha comprometido a que, si la meteorología lo permite, la próxima semana arranque la obra de intervención de urgencia para solucionar de manera inmediata estas goteras y que los niños y niñas puedan seguir utilizando, mientras se llevan a cabo los trabajos, el servicio de guardería. “Ahora mismo lo que más nos preocupa es solucionar este problema de manera urgente y que los niños puedan seguir viniendo a la escuela”, ha explicado Fernández Terroba, que ha destacado que “ahora mismo no existe peligro para los niños” y ha detallado que será Aransa, la misma empresa que está terminando el nuevo colegio de Casalarreina, la que lleve a cabo esta intervención de urgencia por algo más de 40.000 euros.

Los trabajos consistirán en un sellado completo de las perforaciones, sustitución de trozos de la lámina de PVC, colocación de rebosaderos y “una revisión exhaustiva de la cubierta para garantizar la impermeabilización”, como detallado la arquitecta del Gobierno riojano que ha acompañado al viceconsejero en esta visita. Además, los acabados interiores serán restaurados, y se podrían llevar a cabo por la tarde cuando los niños no estén en las instalaciones o se reubicarían a otras aulas mientras se terminan.
Tras esta intervención de urgencia, el viceconsejero también se ha comprometido que se llevará acabo una reforma estructural de toda la cubierta, unos trabajos que podrían llevarse a cabo el próximo verano, por un presupuesto en torno a los 230.000 euros.

Algunos de los padres han pedido “garantías” de que este “parcheado” solucione el problema de las goteras hasta que se realice la intervención total el próximo verano. El viceconsejero y la arquitecta han respondido que esta actuación de urgencia puede solucionar el problema “durante 2-3 años”, pero que es necesaria la “solución definitiva” de la intervención en la cubierta para que los problemas no vuelvan a aparecer y que “no vuelva a llover en el interior de las aulas”, como sucede ahora cada vez que caen precipitaciones en la zona.
Durante la conversación mantenida con los responsables de la Consejería, algunos padres y madres también han propuesto “no gastar dos veces” y que se realice la intervención estructural y reubicar a los niños y niñas en otros centros del entorno, aunque desde el Gobierno y desde la dirección de la escuela han señalado que “no es algo tan fácil”, ya que muchos espacios “no cumplen con la normativa”. “El objetivo ahora es solucionar de manera urgente este problema y que los niños puedan seguir utilizando el servicio de guardería”, ha vuelto a resaltar el viceconsejero.
Con todo, si la obra definitiva no se pudiera llevar a cabo en verano o el período de los trabajos se alargara en el tiempo, la Consejería ya estudiaría reubicar a los niños y niñas o buscar otros espacios para seguir ofreciendo el servicio.