Casalarreina acogió este pasado domingo la feria ‘Proyecto Hombre’ que organiza cada año el Grupo Scout Ghembres. El objetivo es demostrar el compromiso de todo el pueblo, niños y mayores, en ayuda a quienes trabajan en Proyecto Hombre y quienes luchan por salir de las drogas. En definitiva, una mezcla de diversión, enseñar y aprender valores y colaborar en un fin social como por el que pelea Proyecto Hombre.
En esta jornada solidaria, niños y mayores han podido disfrutar de talleres organizados por el Grupo Scout Chembres, diferentes juegos infantiles y degustaciones con el fin de poner en valor el trabajo que realiza Proyecto Hombre, que en 2018 cerró en La Rioja con una “tendencia ascendente” en su número de atenciones, tanto a usuarios como a familias.
Cifras y perfil de los usuarios atendidos por Proyecto Hombre
En concreto, 421 usuarios fueron atendidos en sus diversos programas de tratamiento, casi un 75% más que en 2013, cuando se prestó atención a 241 usuarios. Asimismo, también ha crecido notablemente la cifra de familias que han recibido ayuda: 535 frente a las 483 de 2017 (un 11% más) o las 312 de 2013 (72% más). El número total de personas atendidas (que incluye a los usuarios y sus familiares) se cifró el pasado ejercicio en 1.408.

El perfil de los usuarios que han recibido tratamiento en Proyecto Hombre La Rioja es: mayoritariamente hombre (86%), consumidor de sustancias ‘normalizadas’ y cada vez más joven. En este sentido, destaca el rango de edad de más de 40 años (36%), pero el 54% del total se sitúa entre los 21 y los 40 años, con problemas de adicción principalmente a sustancias ‘normalizadas’ como el alcohol (26%) y el THC o cannabis (28). Los estimulantes en general (27%) y la cocaína en particular (16%) siguen estando presentes también en gran medida. Es importante resaltar en este punto el aumento del THC (cannabis) como adicción principal de las personas tratadas. En los últimos seis años ha pasado de representar el 18% al 28%.
Los usuarios actualmente son personas con un entorno estructurado y normalizado, una familia y un trabajo. También presentan un entorno estructurado las familias que acuden a la entidad en busca de orientación para afrontar conductas desadaptativas de sus hijos o hijas jóvenes, tanto en lo que tiene que ver con el consumo de sustancias como el abuso de las nuevas tecnologías (videojuegos, apuestas, póker online…) u otra serie de problemáticas que necesitan una intervención temprana, aunque no se hayan convertido aún en una adicción, como resaltan desde Proyecto Hombre.