Más reconocimientos para la enológa jarrera María Vargas, que hace historia al acceder, como directora técnica de la bodega Marqués de Murrieta, en el selecto ránking que reúne a las 10 mejores firmas del planeta, de acuerdo con la valoración realizada por la revista de gastronomía, vinos y espirituosos que mayor impacto tiene en el mercado anglosajón como es ‘The Wine Advocate’.
Vargas ya fue proclamada por el maestro del vino Tim Atkin como mejor enóloga de la DOCa Rioja en su Rioja 2017 Special Report, recibió el Premio a las Ciencias del Centro Riojano de Madrid ese mismo año, fue elevada a los altares del sector del vino al conseguir en 2020 que Castillo de Ygay Reserva 2010 fuese catologado por la edición Wine Spectator como Mejor Vino del Mundo, después de convertir al blanco de 1986 en el primer blanco del país que alcanzaba los ansiosos ‘100 puntos Parker’, y también recibió el Premio Jarrerismo 2017 concedido por Radio Haro-Cadena SER. Ahora la jarrera vuelve a dar la campanada al conseguir con el resto del equipo que encabeza Vicente Dalmau Cebrián-Sagarriga lo que ninguna bodega había logrado hasta ahora. Ahí es nada.
La publicación, que fue adquirida hace apenas tres años por la Guía Michelin y que es especialmente considerada por la clasificación anual realizada por el crítico estadounidense Robert Parker, no sólo considera que la bodega asentada sobre los pagos de Ygay reúne méritos más que sobrados para aparecer en el ‘top ten’ mundial, sino que destaca el hecho de hacerlo con más vinos de máxima calificación que el resto de sus competidores.
‘100 puntos Parker’
Y lo consigue después de haber recibido los 100 puntos de la revista para ocho de sus marcas y añadas. Y eso que en esta selección están Petrus, Cheval Blanc, Maison M. Chapoutier, Chateau D’Yquem o Chateau Latour, referentes esenciales en la enología francesa, que son fijos en el listado de The Wine Advocate.
De esta manera, la bodega en la que trabaja María Vargas viene a consolidarse aún más, fundamentalmente desde la llegada de la enóloga jarrera, y la puesta en marcha del ambicioso proyecto de ampliación y actualización impulsado por Vicente Cebrián Sagarriga, como una de las propuestas con mayor impacto en el mercado internacional.
Este nuevo reconocimiento llega en un momento especial para la bodega que cumple este año 170 años desde su fundación, pero también como consecuencia de un desarrollo sostenido que se ha visto refrendado por numerosos premios, todos ellos de enorme valor y credibilidad en el sector del vino. Uno de los menos comentados, pero significativo sin duda, el hecho de que su presidente recibiese el pasado mes de mayo la medalla de la Comunidad de Madrid por la labor que el empresario, de origen gallego pero enamorado de La Rioja que asegura sentir también suya desde que asumió la dirección de la bodega, una de las más antiguas de la Denominación, ha venido desarrollando a nivel internacional.
La posibilidad de que una firma española pudiese entrar, por fin, en ese selecto club, comenzó a barajarse tras conocer la opinión expresada por el gurú de la revista norteamericana tras la cata vertical que realizó recientemente tras probar vinos de infinidad de regiones y países. “Ha sido la mejor de mi vida. Es maravilloso ver cómo una de las bodegas más tradicionales mantiene la calidad produciendo vinos de clase mundial”, concluyó diciendo para resumir las sensaciones que extraía de las etiquetas de Castillo de Ygay en la que su editorial presentó a sus lectores como “la madre de todas las catas”.
En esta trascendetal prueba, Marqués de Murrieta obtuvo la máxima puntuación, los míticos ‘100 puntos Parker’, con cinco añadas diferentes de su vino más emblemático, Castillo de Ygay, que se sumaban a los tres plenos logrados con otros tantos blancos de la misma marca en 2017, otro curso clave en su relato. Y con semejante bagaje en apenas cinco años, el prospector de Baltimore tuvo claro que merecía entrar por la puerta grande en la lista de las diez mejores bodegas del mundo.
Y los primeros puestos de ese prestigioso ránking están, en consecuencia, algo más cerca para la bodega donde desarrolla su labor como directora técnica la enóloga jarrera. El referente es Petrus que, desde la puesta en marcha de esta catalogación, ha conseguido la máxima puntuación en once ocasiones. Porque Cheval Blanc, otra firma gala con base en la región de Burdeos, lo ha conseguido ocho veces, como Marqués de Murrieta que ya supera a Chateu D´Yquem, que suma seis. Una progresión espectacular.
