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Historia del Cossío (VIII): las becas para alumnos de familias humildes

Los profesores del Instituto Manuel Bartolomé Cossío crean cuatro becas para alumnos de familias humildes. Las becas municipales
Aspecto actual de la parte interior de la entrada a la Casa de Caridad e Instituto Elemental Cossío | Foto: F. de la Fuente

El Diario La Rioja, corresponsalía del 09-02-1934, publicaría que, por haber sido designado para ocupar la plaza de profesor de Francés en el Instituto de Segunda Enseñanza de Torrelavega, partiría hacía la localidad cántabra el señor Orellana, que hasta la fecha había ejercido en el de Haro.

Asimismo, el Director del Instituto Enrique Moliner, con arreglo a lo preceptuado por el R. D. de 31 de enero de 1919, nombraría ayudante de la Sección de Ciencias el médico local y profesor de Primera Enseñanza Manuel Mozos Martínez-Crespo, que sería el responsable de las asignaturas de Fisiología y Agricultura.

Sin embargo no todo discurría de forma satisfactoria, ya que en la sesión celebrada el 23 de febrero de 1934 el edil Segundo Ogueta se lamentaría de la forma en se estaban ejecutando las obras de carpintería en el Instituto Elemental de 2ª enseñanza, ya que, denunciaría: … Donde se ocupan a obreros carpinteros parados, que a su juicio no dan el rendimiento necesario, y desea saber cuáles son las obras realizadas, cuál el empleo de los materiales para ellas suministrados, el rendimiento de cada obrero y en fin el costo de cada uno de los efectos construidos, pues está seguro que ellos han costado al Ayuntamiento el doble de su valor y que además la Comisión de Hacienda no ha encontrado suficientemente justificadas algunas facturas de material, teniendo además que aclarar si se ha invertido en las obras el total del material suministrado.

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Se lamenta también que haya habido dinero para pagar dichos jornales y sin embargo no pueda pagarse a los artistas que han construido mesas, sillas y demás efectos para el Instituto, estimando que si no hay para una cosa no debe haberla para otra. Termina pidiendo autorización para que la Comisión de Hacienda compruebe al detalle la inversión de los materiales y el costo de los trabajos realizados, pues el pueblo facilita el dinero para que se administre bien y no para malgastarlo.

El primero en responder sería el Regidor Síndico Antonio Peña, exponiendo: Que él, por su parte, no había intervenido en ninguna compra de material.

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Y el Alcalde Prudencio Fernández-Lacuesta del Val: Que fue autorizado para ordenar la construcción de las obras complementarias del Instituto, las cuáles quedarán terminadas mañana, que los materiales necesarios son encargados por el técnico municipal y que los jornales de obreros se pagan por la Décima, puesto que se invierten en paliar la crisis obrera.

Tras amplio debate se acordaría autorizar a la Comisión de Hacienda para la fiscalización y comprobación de las obras realizadas e inversión en materiales y que, en lo sucesivo, cuantas obras o trabajos que hubieran de realizarse se efectuasen previo concurso o subasta.

El 7 de marzo el Maestro de obras Ernesto Montión, firmaría una minuta sobre la valoración de varios trabajos y materiales empleados en el nuevo Instituto, manifestando que eran los más ajustados que había podido hacer, reflejando:

Valor de la madera empleada en las obras indicadas desde el mes de Enero hasta todo el mes de Febrero o sea en los dos meses que han durado los trabajos, 987,39 pesetas. Importe de la mano de obra, 1.029 pesetas.

Contrato de arriendo del edificio destinado a instituto

El 21 de marzo el edil Jesús Gómez Cruzado preguntaría si se había formalizado el contrato de arriendo del edificio destinado a Instituto. Siendo contestado por el Alcalde Prudencio Fernández-Lacuesta que todavía no se había concretado, ya que sería necesario designar a un concejal para firmarlo por ser incompatible por su calidad de Alcalde y Presidente del Patronato que administraba el edificio.

El 11 de abril el edil José María Martínez Lacuesta, con verdadera satisfacción recalcaría, sería el encargado de informar al Consistorio, que a Manuel Bartolomé Cossío le había sido otorgado el título de primer Ciudadano de Honor de la República, estimando que el Ayuntamiento debía mostrarle su enhorabuena más entusiasta por tratarse de un ilustre hijo de Haro y haber contribuido tan eficazmente al establecimiento en la Ciudad del Instituto Elemental de Segunda Enseñanza.

A lo que el Alcalde Prudencio Fernández-Lacuesta manifestaría, que adelantándose a los deseos de la Corporación, el día de ayer, había remitido un telegrama a tan distinguido harense, diciendo: Manuel Bartolomé Cossío -Francisco Giner 14-Madrid- Pueblo de Haro henchido satisfacción y orgullo de su preclaro hijo envíale su más entusiasta y emocionada enhorabuena por haberle sido otorgado el merecido título primer Ciudadano de Honor de la República a la que siempre sirvió con entusiasmo. Haro se asocia y comparte la intensa emoción que sin duda alguna embarga al más ilustre de sus hijos al ser exaltado al lugar a que se ha hecho acreedor por sus merecimientos. Envíale fraternal abrazo. Alcalde P.F. Lacuesta.

Quedando enterada y conforme la Corporación, añadiendo, que una vez que fuese inaugurado oficialmente el Instituto que llevaría su nombre, se procuraría organizar algo que exaltase la figura del glorioso pedagogo harense.

En la sesión celebrada el 11 de mayo de 1934 se daría lectura de un oficio remitido, el 28 de abril, por el Director del Instituto Enrique Moliner, interesándose por que el Ayuntamiento le concediese el local donde instalar una Escuela Preparatoria para el Bachiller y sobre la indemnización por la casa-habitación que correspondiera a su Maestro. Proponiendo el Regidor Sindico Antonio Peña, que una vez que comenzase a utilizarse el nuevo Grupo escolar, quedarían algunos locales en los que se podría instalar la Preparatoria. Acordándose en sesión que se celebraría el 24 de mayo, que así se realizase.

El diario La Rioja corresponsalía del 11-04-1934 publicaría que, Los señores profesores que constituyen el Claustro del Instituto Elemental Cossío de Segunda Enseñanza de esta ciudad, han creado de su peculio particular, cuatro becas para el expresado Centro docente, que llevarán la denominación que sirve de enunciado a esta noticia, las cuales se concederán a dos niños y a dos niñas pobres.

Las instancias pueden presentarse en la Secretaría del Centro hasta el día 19 del próximo mes de mayo, a las que necesariamente deberán acompañarse un certificado de pobreza expedido por el Ayuntamiento y una certificación comprensiva del sueldo o remuneración que perciba el interesado o el padre del solicitante y que, como determina la ley, deberá ser inferior a 3.000 pesetas, o de cuatro a 5.000 según el número de hijos. La edad de los solicitantes no deberá ser inferior a diez años.

Los exámenes tendrán lugar el día 24 de mayo, constituyendo el Tribunal examinador el señor director del Instituto como presidente y como vocales, los profesores de Ciencias y Letras y los dos directores de las Escuelas graduadas de esta ciudad.

Los ejercicios serán dos: escrito y oral. El primero consistirá en un ejercicio de redacción; un problema de Aritmética, otro de Geometría y otro de análisis gramatical. Este ejercicio será eliminatorio y por tanto no podrán pasar al segundo aquellos aspirantes que no obtengan la calificación de aprobado.

El segundo ejercicio, que como decimos será oral, versará sobre nociones de Ciencias y Letras.

Historia del Cossío (VIII): las becas para alumnos de familias humildes 1

Becas municipales

Las becas serían concedidas a las niñas Rosa Estefanía Cadiñanos y Josefa Verde Salazar, siendo agraciados los niños Arturo Colina Oñate y Rafael Ayala Martínez.

En sesión celebrada el 8 de junio de 1934 la Corporación, por unanimidad, acordaría aprobar el informe, de fecha 2 del mismo mes, de la Comisión encargada de la concesión y disfrute de becas para los alumnos del Instituto, bajo las siguientes condiciones:

1ª.- Crear dos becas de trescientas pesetas anuales cada una, en lugar de tres de doscientas pesetas que figuraban en presupuesto.

2ª.- Que se anuncie al público el plazo de diez días para solicitar y tomar parte en los ejercicios de oposición.

3ª.- Que solamente pueden optar á ellas los naturales de Haro, hijos de padres pobres en sentido legal y de buena conducta.

4ª.- Que perderán el derecho de la beca los beneficiarios á quienes se les forme Consejo de disciplina y el segundo suspenso que tuvieran.

5ª.-Que estas becas se concederán sin distinción de sexos y se disfrutarán hasta terminar el Bachillerato, salvo el caso de que el Ayuntamiento y para alumnos de extraordinaria aplicación acordase conceder estos beneficios durante la carrera Superior.

6ª.- Los becarios quedarán obligados á presentar en la Alcaldía al terminar cada curso, las calificaciones obtenidas en los exámenes.

7ª.-La cantidad objeto de estas becas se entregará á los que resulten agraciados en dos plazos iguales, la mitad al comenzar el curso académico y la otra mitad al terminar los exámenes.

8ª.- Los exámenes para la concesión de estas becas se celebrarán en la Casa-Consistorial, en la fecha, con el programa y ante el Tribunal que el Instituto de segunda enseñanza designe y del que necesariamente formará parte el Secretario de este Ayuntamiento en representación del mismo.

9ª.- La documentación para solicitar estas oposiciones llevará timbre de pobre, por ser á estos á los que se destinan las becas.

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