Finca Valpiedra, una de las cinco bodegas de Familia Martínez Bujanda, ha logrado el certificado ‘Wineries for Climate Protection’, la mayor distinción en materia de sostenibilidad medioambiental para bodegas. Este reconocimiento de gran prestigio internacional supone “un logro para la familia, que reafirma su decidida apuesta por la sostenibilidad y la ecología en su finca”, situada en Fuenmayor.
Finca Valpiedra, que forma parte de la Asociación Grandes Pagos de España desde sus inicios, posee una ubicación privilegiada, en uno de los meandros que forma el río Ebro a su paso por La Rioja. Su espectacular paisaje, distribuido en tres terrazas que bajan hasta el propio río, se divide en quince parcelas diferentes con altitudes superiores a los 400 metros.
Estrategia medioambiental
Finca Valpiedra se reafirma en su estrategia medioambiental tras la consecución de este certificado, que supone un paso más en el trabajo que ya se estaba desarrollando en todas las bodegas de la familia, y por el que trabajan cada día a conciencia. En sus cultivos, se ha reducido a cero el uso de pesticidas y metales hasta llegar a una producción 100% ecológica. Se ha optimizado el uso de recursos hídricos y todas ellas cuentan con instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo.
Pero no se queda aquí, ya que se aprovecha cualquier factor que siga esta línea como la optimización de la arquitectura de cada bodega. Además, en los vinos, se utilizan tapones de corcho natural que tienen un balance energético positivo y se ha aligerado un 10 % el peso de las botellas sin perder imagen.
Y los sarmientos procedentes de la poda, se destinan a la creación de energía limpia biomasa; en este sentido, los restos de la vendimia tras la vinificación se compostan para obtener abono orgánico que se incorpora de nuevo al viñedo.
El futuro del viñedo está relacionado con una agricultura sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Por eso y desde hace años en Familia Martínez Bujanda su tradición en el cultivo de la vid les ha impulsado a buscar soluciones que mejoren el rendimiento de sus viñedos y que, al mismo tiempo, resulten sostenibles y respetuosas con el entorno.
Impulsado por la Federación Española del Vino (FEV), ‘Wineries for Climate Protection’ surgió en 2015 como la única certificación específica que existe en dicho ámbito y goza de un gran prestigio tanto a nivel nacional como internacional. Se fundamenta en cuatro pilares medioambientales: rebajar el consumo de energía, de agua, las emisiones y los residuos; aunque, desde enero de 2023, se han ampliado los criterios que incorpora el distintivo, incluyendo aspectos relacionados con sostenibilidad social, económica y de gobernanza.
