El director general de Cultura, Roberto Iturriaga, ha visitado el Archivo Histórico Provincial de La Rioja, acompañado por su directora, María Teresa Castañeda, y los dos nuevos becarios que desde hace unas semanas tienen oportunidad de formarse en disciplinas relacionadas con el tratamiento de documentación histórica, a través del trabajo que van a llevar a cabo en las dependencias del Archivo Histórico Provincial de La Rioja, “un centro de vital importancia para la historia de nuestra comunidad autónoma, cuyo objetivo fundamental es conservar, documentar, organizar y difundir los fondos que en él se custodia”, ha destacado Iturriaga.
Desde la Consejería de Cultura, Turismo, Deporte y Juventud, conscientes de la necesidad de ofrecer formación a las nuevas generaciones de futuros archiveros y bibliotecarios, como ha explicado Iturriaga, “se convocaron cuatro becas dirigidas a la formación de profesionales técnicos de archivos y bibliotecas, dos para cada una de las especialidades, por el procedimiento de concurrencia competitiva”. De las cuatro becas convocadas, finalmente, tan sólo se han podido adjudicar las dos relativas a Archivística, ya que en esta ocasión no se recibieron solicitudes para la especialidad de Bibliotecas.
Un período máximo de tres años
Así, desde el pasado 5 de noviembre y hasta un periodo máximo de tres años, Aldara Cillero y Samuel González se encuentran formándose y perfeccionándose en la disciplina técnico-profesional en Archivística, y en concreto sobre las actividades del Archivo Histórico Provincial de La Rioja. En concreto, “durante la beca aprenderán tareas relacionadas con atención a los usuarios y/o investigadores, clasificación, ordenación documental, digitalización de documentos, descripción archivística, al tiempo que podrán colaborar en las tareas de difusión que se lleven a cabo desde el Archivo Histórico Provincial de La Rioja”, ha explicado Castañeda.
Durante su estancia en el Archivo Histórico Provincial de La Rioja, como ha subrayado su directora, “estos dos jóvenes, esta savia nueva con muchas ganas de trabajo e ilusión”, tendrán la oportunidad de conocer diferentes fondos documentales, familiarizarse con las diferentes tipologías de documentos, practicar la lectura de textos históricos o aprender los procedimientos técnicos que se aplican a cada fondo para su puesta al servicio de ciudadanos e investigadores. Una labor que ya han comenzado a realizar y en la que, como ha relatado Aldara, “nos hemos encontrado con un espacio que me ha fascinado, en el que hay mucho trabajo y en el que he descubierto una salida profesional que no me había planteado”. Además, ha añadido, “no deja de sorprenderme, cada día conocemos una cosa nueva, más curiosa que la anterior”.
Características del Archivo Histórico Provincial de La Rioja
El Archivo Histórico Provincial de La Rioja (AHPLR), como lo ha definido la directora, “es un mundo a menudo desconocido para el gran público, pero que custodia la historia de nuestros antepasados y de La Rioja, albergando una multiplicidad de fondos y siendo considerado un archivo de archivos de gran riqueza”.
El Archivo tiene como misión la recogida, conservación, organización, difusión de los documentos notariales y registrales centenarios de la provincia, así como de los generados por la Administración Delegada del Estado en la Comunidad Autónoma en su fase intermedia e histórica. Igualmente puede custodiar documentos de otras administraciones, personas físicas o jurídicas, públicas o privadas, en su fase histórica, ingresados por depósitos o donaciones, todo ello encaminado a incrementar el Patrimonio Documental de La Rioja.
El edificio, que respeta la fachada de estilo neoclásico de una casa palacio del último tercio del siglo XVIII perteneciente entonces a la familia Orive, está situado desde el 29 de abril de 1983 en el número 24 de la calle Rodríguez Paterna de Logroño. En concreto, consta de tres plantas en su parte pública y de cinco más sótano en la destinada a depósitos, de acceso restringido.
Correspondiendo al origen de creación de los Archivos Históricos Provinciales, el de La Rioja conserva como fondo fundacional el de los Protocolos notariales de la provincia, los cuales ingresan al ser centenarios y que hoy alcanza más de 9.900 unidades de instalación. El interés de los protocolos notariales como fuente documental para la Historia es tan relevante que es unánime su valoración: son una ventana abierta al pasado. Con ellos tenemos la información no sólo más cotidiana y fiable sino, en muchos casos, la única que ciertas generaciones han dejado escrita.
Fondos judiciales (Justicia de Antiguo Régimen, Audiencia Provincial, Juzgados de Primera Instancia, Tribunal de Responsabilidades Políticas, Juzgado de Menores…)
y registrales (Contadurías de Hipotecas de Arnedo, Cervera del Río Alhama, Haro, Santo Domingo de la Calzada, Torrecilla en Cameros), con irregular cronología, son otras de las secciones que contempla el Archivo.
Además, según el Decreto 914/1969, de 8 de mayo, del Ministerio de Educación y Ciencia, los Archivos Históricos Provinciales son los encargados de conservar fondos procedentes de la Administración Central delegada en la provincia, como archivo intermedio para la citada Administración.
En lo relativo a archivos privados, su origen es principalmente familiar y nobiliario, adquiridos por compra o donación. Son los casos de los fondos Pérez Navarrete, Sáenz de Heredia, Pujadas-Alesón o Montoya Salazar, entre otros, que representan el complemento a los archivos de origen público.
Entre los servicios a la ciudadanía que ofrece el Archivo Histórico Provincial destacan las consultas generales, entre las que se incluyen las consultas catastrales presenciales, que se pueden realizar de lunes a viernes, de 9 a 14 horas. Además, las consultas también se atienden a través de correo ordinario, electrónico, fax y por teléfono.
En cuanto a los servicios dirigidos a la Administración Pública figuran la transferencia y préstamo de documentos, así como la custodia de archivo en depósito. Este espacio también permanece abierto a los investigadores que, además de poder acceder a las consultas, pueden recibir asesoramiento, atención y préstamo de documentos en la sala de investigación del Archivo, previa reserva de plaza (vía telefónica o por e-mail.) Por otra parte, cuentan con un lector de microfilm y una biblioteca auxiliar, con más de 3.000 volúmenes, especializada en Historia, Archivística, Ciencias Auxiliares de la Historia e Historia Local.
A todo ello se suman los servicios educativos y culturales que se extienden a lo largo de todo el año en el que el Archivo Histórico Provincial abre sus puertas a las visitas a guiadas de escolares, grupos o entidades; colabora con talleres didácticos; presta sus documentos y asesora a exposiciones.
