El Consejo de Gobierno ha acordado destinar 180.512 euros a renovar el convenio de colaboración con la Fundación Cáritas-Chavicar para desarrollar un programa de Inclusión Social Activa en las demarcaciones de La Rioja Alta y Rioja Baja, concretamente en Santo Domingo de la Calzada y Calahorra.
Según ha destacado la portavoz del Gobierno regional, Begoña Martínez Arregui, el objetivo del programa de Inclusión Social Activa es la “reestructuración personal y social de personas en situación de exclusión social e implica el tratamiento individual y el abordaje de conflictos, así como la realización de actividades básicas de socialización”. Para ello, contempla actuaciones de carácter socioeducativo, psicológico y de habilidades personales.
Atención individualizada
Esta iniciativa está enfocada a prestar atención individualizada recuperadora a personas mayores de 18 años y menores de 60, residentes en La Rioja, que se encuentren en situación de exclusión social para lograr su reincorporación e integración en la vida social activa. También pretende prevenir situaciones y comportamientos de riesgo y evitar la aparición de problemáticas sociales.
Martínez Arregui ha detallado que “se desarrollarán, de forma simultánea, un máximo de 40 programas individualizados de inserción, 20 de ellos en Santo Domingo de la Calzada y otros 20 en Calahorra”. Por ello, Cáritas-Chavicar deberá disponer de medios suficientes y del personal necesario para desarrollar el programa. En concreto, deberán contar con trabajador social, psicólogo, educador social, y monitores con titulación en Grado Superior de Inclusión Social.
El acceso al programa es voluntario, pero el usuario deberá suscribir un documento de aceptación de participación que contiene normas de funcionamiento y convivencia, cumplimiento de horarios, derechos y deberes. A partir de su incorporación, el equipo de Cáritas-Chavicar elaborará un programa individualizado de inserción que irá evaluando de forma continua durante 6 meses.
La permanencia máxima del usuario en este programa será de dos años y el cese del mismo deberá ser consensuado por los profesionales del equipo de Cáritas-Chavicar, de la unidad de trabajo social y del centro de coordinación correspondiente.
