El consejero de Fomento y Política Territorial, Carlos Cuevas, y el alcalde de Villarta-Quintana, José Miguel Crespo, han firmado hoy un convenio de cooperación para financiar las obras de reurbanización de la calle Real y la plaza de la iglesia.
Estos trabajos pretenden mejorar las instalaciones de agua en ambos puntos de la trama viaria de este municipio de la comarca calceatense cuya población ronda los 150 habitantes. De esta forma, se evitarán las frecuentes averías, que generan un elevado coste en reparaciones, además de las molestias a los vecinos por las interrupciones en el servicio y la mala calidad del suministro.
Las circunstancias actuales hacen inviable la conexión al sistema de abastecimiento del Oja-Tirón, por lo que el Ayuntamiento de Villarta-Quintana ha solicitado la ayuda de la Comunidad Autónoma para que colabore económicamente en esta actuación, una de sus principales prioridades en esta legislatura.
El presupuesto de licitación asciende a 240.610 euros y el Gobierno de La Rioja se ha comprometido a financiar el 90% de la inversión, mientras que el Ayuntamiento de Villarta-Quintana aportará la cantidad restante. Para ello, renuncia a las asignaciones que le corresponden en el Plan de Obras y Servicios 2017-2018 y 2019-2020, lo que supone 140.000 euros aproximadamente. El plazo de ejecución de las obras es de tres meses.
Este acuerdo se incluye dentro del Fondo de Cooperación Local, con un partida de 16,6 millones de euros en 2018, en apoyo a las inversiones municipales que mejoren las infraestructuras y servicios públicos de su competencia local exclusiva (abastecimiento de agua, red de saneamiento, urbanización de calles, alumbrado público…). El objetivo es contribuir a aumentar la calidad de vida y el bienestar en los pueblos, así como impulsar la economía y el empleo.
Detalles del proyecto
El proyecto consiste en la renovación de la red de distribución de agua potable y la ejecución de una nueva red de recogida de aguas pluviales, así como la pavimentación en dos zonas del pueblo que son: el tramo de la calle Real, continuación de las calles La Parra, Palacio, hasta la plaza Glorieta, y por otro lado parte de la calle Camino Santamaría y la plaza de la Iglesia.
La nueva red de distribución de agua potable se repondrá a lo largo de 583 metros lineales en ambos márgenes de las calles con objeto de mantener el actual emplazamiento de las conexiones a los domicilios de esta zona del pueblo. Además, se colocarán las bocas de riego e hidrantes.
El nuevo colector para la recogida de aguas pluviales tendrá una longitud de 311 metros, con ocho pozos de registro.
La pavimentación en ambas zonas afectará a una superficie de 2.329 metros cuadrados e incluirá una canaleta en el eje de la calle para recoger el agua de lluvia.
