La Selección Española dio en Georgia otro paso firme hacia el Mundial de 2026 con una contundente victoria (0-4) que volvió a subrayar el excelente momento del equipo dirigido por Luis de la Fuente. El combinado nacional firmó una actuación rotunda, madura y efectiva, reflejo de la personalidad que el técnico jarrero ha imprimido al grupo desde su llegada.
España arrancó el duelo con una intensidad abrumadora y pronto encontró premio: un penalti transformado por Oyarzabal en su partido número 50 como internacional. El tanto abrió un torrente de fútbol ofensivo que desembocó en el 0-2 de Zubimendi y en el gol de Ferran Torres antes del descanso, en una primera mitad que rozó la perfección.
En la segunda parte, Georgia trató de reaccionar, pero el equipo español —sólido, equilibrado y fiel a la propuesta de De la Fuente— no perdió el control en ningún momento. Oyarzabal cerró la goleada con un certero cabezazo y España alcanzó su trigésimo partido consecutivo sin perder, nuevo récord histórico, además de mantener su portería a cero por quinta jornada seguida en la fase de clasificación.
Pleno de victorias
Con pleno de victorias, 19 goles a favor y ninguno en contra, la Selección sigue su marcha impecable hacia el Mundial. Y en Haro, una vez más, se celebra: el sello de Luis de la Fuente, tan discreto como decisivo, continúa guiando a una España que juega como él siempre defendió que debía jugar: unida, valiente y reconocible, lo que la deja virtualmente clasificada para el Mundial 2026. Solo una derrota sonrojante ante Turquía la enviaría a la repesca.






