El bar-restaurante de las piscinas municipales de Anguciana reabre sus puertas bajo nueva dirección. ‘La ribera del Tirón’, como ha sido bautizado es el proyecto personal de Manuel Ábalos (Briones, 1997), nuevo responsable del establecimiento y con una amplia trayectoria en el sector hostelero.
La nueva concesión se hizo oficial el pasado mes de mayo. Durante un tiempo, Ábalos compaginó su nuevo proyecto con su anterior empleo en un hotel de lujo, aunque en las últimas dos semanas se ha dedicado “en cuerpo y alma” a su nueva responsabilidad. Esta concesión tendrá una duración de cuatro años.
Entre las primeras actuaciones acometidas por Ábalos está una reforma completa de la barra, que ha sido reubicada, así como una parte de la cocina, que “se quedaba pequeña tal y como estaba diseñada”.
La oferta del local será amplia y variada. En su renovada barra se servirán desayunos, almuerzos, comidas y cenas. El horario de apertura será de lunes a sábados de 9 de la mañana a 2 de la madrugada, mientras que los domingos, coincidiendo con la celebración del mercadillo, abrirá desde las 8 de la mañana hasta las 12 de la madrugada. Todo esto se aplicará durante el verano, que el establecimiento estará abierto también los fines de semana de invierno, con el objetivo de “aportar vida al pueblo”.
En la carta se podrán encontrar raciones, platos combinados, bocadillos y hamburguesas, todo ello con un especial cuidado en el producto de kilómetro cero. Algunas de las especialidades serán las croquetas caseras y las setas con huevo a baja temperatura y trufa fresca, “un plato que es una auténtica explosión de sabor”.
“Los bocadillos y las hamburguesas están casi todos inventados, serán los clásicos, pero con buen producto, mucho mimo y cariño”, asegura Ábalos, que avanza que también se podrán reservar comidas para grupos con menú cerrado.
Revitalizar la ribera y “dar alegría” al pueblo
El objetivo de este joven emprendedor es “revitalizar la ribera del Tirón” y ofrecer un buen servicio a los numerosos visitantes que acuden al mercadillo dominical, cuando la localidad “gana mucha vida y recibe muchos visitantes de otras localidades”.
“Hay que dar alegría y vida al pueblo, que es muy bonito, pero se tiene que notar que está vivo y que se hacen cosas en él, y nosotros venimos a aportar nuestro granito de arena a todo eso”, afirma Ábalos, que no se olvida de todas las personas, amigos y familia que lo han apoyado en este proyecto. También ha querido destacar que ha contado con “todo el apoyo” del Ayuntamiento de Anguciana y de su alcalde, Jorge Loyo, que ha puesto “todas las facilidades del mundo” para hacer realidad esta reapertura en un tiempo récord. La inauguración oficial tuvo lugar este pasado miércoles y a ella acudieron familiares, amigos y vecinos de la localidad.
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