La reina Letizia ha presidido la clausura de la XVI edición del Seminario Internacional de Lengua y Periodismo, de la Fundación San Millán de la Cogolla (FSMC) y la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE), cuya bienvenida ha estado a cargo del presidente de La Rioja y presidente de la FSMC, Gonzalo Capellán, y en la que el director de la Real Academia Española (RAE) y presidente de la FundéuRAE, Santiago Muñoz Machado, ha dirigido la sesión de cierre, en la que han intervenido los distintos participantes de las jornadas.
La clausura ha contado, además, con la presencia del ministro de Transformación Digital, José Luis Escrivá; del consejero de Cultura, Turismo, Deporte y Juventud de La Rioja y vicepresidente de la Fundación San Millán de la Cogolla, José Luis Pérez Pastor, la presidenta de la Agencia EFE y la vicepresidenta de FundéuRAE, Gabriela Cañas, y de varios miembros del patronato de la FundéuRAE —las académicas de la RAE Soledad Puértolas y Carme Riera, y el periodista Álex Grijelmo—.
“Cambio climático: lenguaje y comunicación”
Bajo el título «Cambio climático: lenguaje y comunicación», ambas fundaciones han celebrado los días 23 y 24 de noviembre este seminario, que en esta ocasión ha reunido a científicos, expertos en derecho ambiental, divulgadores, activistas y periodistas en torno a tres debates.
La inauguración del seminario estuvo a cargo del consejero de Cultura, Turismo, Deporte y Juventud de La Rioja y vicepresidente de la Fundación San Millán de la Cogolla, José Luis Pérez Pastor, y de la vicepresidenta de la FundéuRAE y presidenta de la Agencia EFE, Gabriela Cañas.
En el primer debate, «Entendiendo a los expertos: el primer eslabón del cambio», coordinado por la directora de la FundéuRAE, Olivia Piquero, participaron María José Sanz, directora científica del centro vasco para el cambio climático BC3; Laia Alegret, catedrática de Paleontología y académica de la Real Academia de Ciencias Físicas, Exactas y Naturales de España (RAC), y los catedráticos de Derecho Administrativo Andrés Betancor y Blanca Lozano, quienes expusieron, desde sus respectivas áreas de especialización, que uno de los principales retos del lenguaje científico y técnico es trasladar ese conocimiento, hacerse entender.
Así, partiendo de la premisa de que la respuesta ante el cambio climático comienza con las investigaciones científicas, que marcan la hoja de ruta a los distintos actores que buscan medidas prácticas, se desgranaron varias claves y diversas necesidades, como la importancia de la traducción medioambiental o la urgencia del uso de un lenguaje claro partiendo de lo más esencial: explicar el cambio climático.
Se reflexionó, asimismo, sobre el hecho de que los lenguajes complicados surgen porque no hay consenso de base y se insistió en que en el lenguaje sobre el cambio climático es muy importante contextualizar, ya que es un modo de comunicar sin opinar ni especular. A vueltas con la importancia de emplear las palabras adecuadas, también se explicó que las predicciones científicas no son especulaciones y se señaló que la terminología es solo un instrumento.
La manera de presentar la información en los paneles internacionales, la relación de los expertos con los medios de comunicación, los libros sobre derecho ambiental o cómo se hacen los diccionarios de esta especialidad fueron otras de las cuestiones que se trataron en la mesa redonda.
Durante el segundo debate se abordaron cuestiones relacionadas con el activismo y la divulgación más allá de los medios de comunicación. Ambos son eslabones de la cadena informativa sobre la crisis climática y promueven, además, la movilización de la sociedad en beneficio del medioambiente. Así, en la mesa «De la palabra a la acción ambiental: activismo y divulgación», participaron los creadores de las iniciativas Vivir sin Plástico y Un Océano sin Plástico, Patricia Reina Toresano y Fernando Gómez Soria; la física y meteoróloga Isabel Moreno, y el fundador del blog Meteosojuela, el médico José Calvo. La conversación, moderada por Almudena Martínez, coordinadora general de la Fundación San Millán de la Cogolla, giró en torno a la concienciación, a la necesidad de ser conscientes de lo que pasa y al siguiente paso: contarlo.
Divulgación del cambio climático
Partiendo desde sus experiencias personales, los participantes explicaron cuál fue el momento en el que decidieron avanzar más y comenzaron a pensar en transmitir, en cómo movilizar a la población.
La necesidad de contar el cambio climático no solo desde el punto de vista científico, sino desde otras visiones (social, sanitaria, etcétera); la importancia de no quedarse solo en los titulares, sino de comprender toda la información; la búsqueda de fuentes de información fiables, o el uso de otros recursos (como imágenes o gráficos) para explicar todo de la manera más sencilla posible, fueron otros de los temas que se pusieron sobre la mesa.
Los ponentes hablaron también de la divulgación basada en la cercanía, en las historias, siempre llamando a las cosas por su nombre, pero procurando que se entiendan los términos empleados.
En la segunda jornada se celebró el tercer debate, «Cambio, crisis o emergencia: el papel del lenguaje en la información medioambiental», que reunió a Arturo Larena, director de Medio Ambiente y Ciencia de la Agencia EFE y de EFEverde; Clemente Álvarez, coordinador de la sección de Clima y Medio Ambiente de El País; Teresa Guerrero, responsable de la sección de Ciencia de El Mundo, y Eva Rodríguez, periodista especializada en medioambiente y ciencias sociales de la agencia SINC, y fue moderado por el matemático y divulgador riojano Eduardo Sáenz de Cabezón.
Los participantes abordaron cuestiones como la terminología utilizada para referirse a la situación medioambiental actual, el empleo del lenguaje técnico en las informaciones o la necesidad de explicar correctamente el contexto en el que se enmarcan.
Asimismo, los periodistas medioambientales reflexionaron desde su propia experiencia sobre la importancia de la precisión y el rigor y sobre la búsqueda constante de la mejor manera de transmitir a la sociedad las implicaciones del cambio climático, así como de la necesidad de educar a las generaciones futuras.
Capellán: “El lenguaje no es ajeno a la realidad, sino que es una de las vías por las que se manifiesta la preocupación por el cambio climático”
Durante la clausura, el presidente Gonzalo Capellán ha destacado que nacional de Lengua y Periodismo ‘Cambio climático: lenguaje y comunicación’, que “el lenguaje no es ajeno a la realidad, sino que es una de las vías a través de las que se manifiesta la preocupación de la sociedad por el cambio climático”.
Capellán ha querido agradecer la presencia de SM la Reina y “su compromiso con este seminario y con San Millán de la Cogolla”, en una cita anual que ha calificado de “pertinente, ya que los medios de comunicación son la vía por la que nuestra lengua se socializa”. Del mismo modo, ha elogiado el trabajo de la Fundación San Millán de la Cogolla, que 25 años después de su fundación “continúa con su misión, que ha cumplido de manera ejemplar, de cuidar este patrimonio y difundir y promocionar la lengua española”.
Desde la perspectiva de la semántica histórica, el presidente del Gobierno regional ha reconocido que “el lenguaje tiene un carácter performativo, refleja la realidad, interactúa con ella y es parte de esa realidad”, y se manifiesta, por ejemplo, en “la preocupación por el cambio climático, que ha sido capaz de generar todo un corpus de términos y lo hace en torno a las repercusiones que el hombre con su interacción tiene sobre el planeta”.
En este sentido, ha puesto el ejemplo de La Rioja, “donde el vino es, junto a la lengua, otra de nuestras señas de identidad”. Así, ha apuntado que “los viñedos se extienden a lo largo y ancho de la comunidad y como bien conocen los viticultores, los efectos del cambio climático son tan reales que afectan a su día a día, a su economía”. De esta forma, ha recordado que, “en Berceo, hay unos viñedos de uva blanca que se elevan por encima de los 700 metros”, lo que demuestra que “cada vez más, los viticultores van ocupando terrenos antes impensables por su altura para el cultivo de la vid”.
Por todo ello, “resulta pertinentes las reflexiones que podamos trasladar a través de los medios, y de todo el lenguaje, a la sociedad para que sigamos siendo conscientes, como sociedad, de la importancia del cambio climático y de sus consecuencias, que afecta a nuestra vida real y que tenemos que hacer lo posible entre todos para mitigar sus efectos”, ha concluido Capellán.