Hay una criptomoneda que ha dado mucho de qué hablar: se trata del XRP, que se ha mantenido en el top 10 de criptomonedas por más tiempo que muchos de sus competidores, ubicándose en el cuarto puesto en cuanto a capitalización de mercado. Para marzo de 2022 sólo estaba por detrás de Bitcoin, Ethereum y XRP. Al comprar criptomonedas en exchanges, es muy probable encontrarse con el XRP.
Sin embargo, Ripple tiene sobre sus hombros una demanda de la SEC desde 2018. Según fuentes anónimas, está a punto de emitirse el fallo del litigio Ripple-SEC. En este artículo se explicará más sobre XRP y la demanda de la SEC.
¿Qué es Ripple y su token XRP?
Ripple es un protocolo criptográfico creado por Ripple Labs Inc en 2012 y que tiene una versión estable desde 2018. El token usado por este protocolo se llama XRP.
El objetivo de Ripple es servir de puente para enviar dinero y remesas. Es decir, que piensa acabar con el sistema SWIFT, que hace que las transferencias internacionales sean lentas y costosas.
Para esto, Ripple Labs vende tokens a los bancos y empresas financieras a precios por debajo del valor de mercado, con el fin de que estos se unan como nodos en la red Ripple.
Aunque hay monedas que son muy intercambiadas todos los días, como el dólar estadounidense, la libra esterlina, el yen y el dólar hongkonés, otras no cuentan con tanto volumen de transacciones. Hacer intercambios entre el franco CFA y el yen es casi imposible sin pasar por el dólar o el euro antes.
Ripple como intermediario puede servir para que se puedan convertir 100.000 francos CFA en yenes al instante y sin muchas comisiones. Las transacciones entre un banco en Burkina Faso y otro en Japón se hacen y validan en menos de 60 segundos.
Sin embargo, de momento la mayor utilidad del XRP está dentro del ecosistema cripto. El token sirve para hacer intercambio de criptomonedas entre distintas plataformas, debido a que el costo de las transacciones es muy bajo tanto en la red como en los exchanges centralizados.
¿Cuáles son las razones de la SEC para demandar a Ripple Labs?
En mayo de 2018 fue introducida una demanda contra Ripple, pues presuntamente habían vendido tokens que no estaban debidamente registrados. Además, se hablaba de que hacían una oferta inicial de monedas (ICO) técnicamente infinita.
No fue hasta diciembre de 2020 cuando la U.S. Securities and Exchange Commission (conocida como SEC) empezó a procesar una demanda contra Chris Larsen y Brad Garlinghouse, los creadores de Ripple.
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Ripple es una empresa estadounidense y para venderle tokens XRP a ciudadanos de ese país debían inscribir los tokens de Ripple como Security en vez de cómo un Commodity. De acuerdo a la SEC, invertir en XRP equivale a invertir en la empresa, por lo que estas ventas eran más parecidas a las ventas de acciones de una empresa que a la venta de un commodity.
De acuerdo a la SEC, el XRP debe ser registrado como un security. Puesto que Ripple ha fallado al no registrarla de este modo, opera sin los permisos de la Comisión de Bolsa y Valores. Lo que implica que el XRP se ha vendido de forma ilegal en Estados Unidos desde su salida hasta el momento.
Es importante saber que otros países con sofisticados sistemas financieros como España, Japón y Singapur consideran al XRP una criptomoneda, no un security.
Debido a que en Estados Unidos el derecho es consuetudinario, el desenlace de este caso puede sentar un precedente legal para que la SEC tome acciones legales contra otros tokens vendidos a ciudadanos estadounidenses. Comprar criptomonedas desde Estados Unidos tiene una dificultad añadida.
Después de que se interpuso la demanda contra Ripple, muchas ICO (siglas de Initial Coin Offer) de criptomonedas bloquearon a los ciudadanos estadounidenses de sus White Lists.
¿Cuándo terminará el litigio entre Ripple y la SEC?
En un tweet del 4 de marzo de 2022, el maximalista del Ripple @Stedas compartió una imagen con un mensaje del CEO de Ripple, Brad Garlinghouse que decía “El lunes fue el último día del testimonio del experto. El caso continua hacia adelante, estamos esperando una decisión de la corte más temprano que tarde.”
Sin embargo, para finales de marzo de 2022 todavía no hay un fallo. Muchos en el entorno cripto están a la expectativa de que puede pasar y cómo afectará esto al ecosistema.
