La Junta de Gobierno Local de Santo Dominbo ha aprobado la sustitución y puesta a punto de las luminarias de la avenida de Haro por 17.914,05 euros.
Desde el equipo de Gobierno Local aseguran que apuestan “por el ahorro, y el alumbrado público es uno de los asuntos prioritarios, no solamente por el ahorro económico sino también por la reducción de la contaminación lumínica”.
Cambio progresivo de la red a iluminación LED
Por ello, el Consistorio calceatense está dividiendo en fases este proyecto mayor para llevar a cabo “un cambio progresivo” de la red de iluminación a tecnología LED.
Una de las calles que más consume potencia en la localidad es la avenida de Haro, que cuenta actualmente con 47 luminarias, de las que más del 60 % son de 400 watios y el resto de 250 watios.
“Aparte del ahorro económico que supone esta intervención también supone una gran mejora en la iluminación, siendo una de las calles con más circulación, con lo que ganaría también en seguridad vial”, destacan desde el Ayuntamiento.
De esta manera, se van a sustituir y se van a poner a punto 47 luminarias de sodio, que van desde el arco del Ayuntamiento hasta la ermita del Santo. Se instalarán luminarias LED tipo vial 150 watios con chip Philips Lumileds y Driver Mean Well 6.000k, con cinco años de garantía, según información del Ayuntamiento.
Asimismo se colocarán protectores de sobretensiones de 10 kv por cada luminaria, cambio de cableado desde la base de la farola a la luminaria y la colocación de portafusibles en cada farola.

El alcalde de la localidad, David Mena, destaca que el equipo de Gobierno Local sigue “mejorando iluminaciones en sectores de la ciudad con problemas. Es un trabajo que hay que ir comenzando por una selección de zonas y poco a poco iremos consiguiendo una eficiencia energética totalmente necesaria”.
“Cuando se cambian las luminarias, los vecinos se dan cuenta de la mejora de la visibilidad, y de cómo nos beneficiamos todos de ella, no sólo los vecinos, sino todos los calceatenses y visitantes que pasan por esa zona. También creo que desde hace muchos años ya se debería haber empezado a afrontar este problema lumínico”, considera.