San Vicente de la Sonsierra ha celebrado este domingo la tradicional festividad de la Cruz de Mayo, con la procesión del Viacrucis que ha recorrido el entorno de la localidad riojalteña desde las seis de la tarde.
La procesión, con la participación de 8 ‘picaos’ realizando la tradicional penitencia, ha arrancado en la parroquia de Santa María la Mayor, dentro del recinto amurallado, y ha continuado su recorrido hasta el Monte Calvario, para regresar después al punto de partida.
Para participar en el rito, se requiere que el disciplinante sea un varón adulto, practicante del catolicismo. Si el individuo no es miembro de la cofradía, se le pedirá que presente un certificado emitido por su párroco que atestigüe su devoción religiosa. Durante la procesión, los ‘picao’ visten una túnica de lino blanco que les cubre el rostro y una capa marrón. En la espalda, se flagelan con un látigo hecho de cuerdas de cáñamo.