Hoy, ARAG-ASAJA ha alcanzado un acuerdo con las bodegas y cooperativas para reducir sus rendimientos de transformación durante los próximos dos años. El Consejo Regulador ha aprobado el compromiso, que incluye limitar la entrada de vino de mesa al 4% máximo en dos años y suspender las plantaciones por al menos tres años.
Después de duras negociaciones, la organización agraria ha logrado que las bodegas y cooperativas también hagan concesiones para recuperar el equilibrio entre la oferta y la demanda de la DOCa Rioja en los próximos dos años.
“Garantizar la rentabilidad de los viticultores”
El objetivo principal de ARAG-ASAJA es “garantizar la rentabilidad de los viticultores en un contexto de existencias históricas en depósitos y barricas y ventas penalizadas por la inflación”. Si no se hubiera firmado este acuerdo, “los rendimientos amparados podrían haber sido del 100% en el campo y del 70% en la bodega”.
Además, el acuerdo será revisable “si las ventas mejoran” y se alcanza antes el equilibrio deseado entre la producción y las ventas, así como si se producen otros fenómenos climáticos.