Como antes de la pandemia, Haro ha celebrado la festividad de San Isidro Labrador, patrón de los agricultores. Tras dos años de pandemia, la ciudad jarrera ha podido recuperar los tradicionales actos en honor al santo. Así, tras la misa celebrada en la basílica de la Vega de Haro, que ha finalizado sobre las 13:00 horas, se ha procedido a la bendición de los campos en los aldeños del templo jarrero.
Después de esto, el Restaurante Terete ha acogido la comida de hermandad en la que se ha procedido a la entrega del premio San Isidro a José Luis Angulo, consistente en el jarro de la ciudad y un ramo de flores.
Angulo ha recibido este reconocimiento por “toda una vida dedicada a la ganadería y la agricultura y por su dedicación, compromiso y defensa de los productos de proximidad. Toda una vida profesional dedicada al sector primaria en el que ha desarrollado su actividad vendiendo los productos de sus huertas a almacenes de Haro y en el mercado municipal durante décadas”, destacaban desde el Ayuntamiento jarrero.


